Antecedentes

Antecedentes

Al inicio del año 1978 el Preautonómico Vascongado (régimen anterior al estatuto de autonomía, ideado por el Gobierno de Adolfo Súarez) era un hecho y el debate constitucional acababa de iniciarse en la Cortes surgidas de las elecciones de junio de 1977. El Régimen Preautonómico había traído un Consejo General Vasco dejando a Navarra en la cuneta. El proyecto de constitución que se aprobaría a finales de ese año, contenía una autonomía basada en la salvaguarda de la sacrosanta “unidad de España”, en la negación del derecho de autodeterminación del pueblo vasco, y de la territorialidad de Euskal Herria. Por un lado se trabajaba en la mesa política haciendo que partidos como el PNV, PSOE y PCE aceptasen los antidemocráticos límites que imponía la derecha, y por otro la represión era una constante en Navarra durante todo el año 1978.


El primero de mayo estuvo plagado de incidentes, con intervenciones brutales de la policía. Las actuaciones de bandas de incontrolados y fascistas era otra de las notas características de aquellas fechas. El día 9 de mayo muere un Guardia Civil en atentado de ETA en Pamplona. Al día siguiente después del funeral, una manifestación de extrema derecha ocasiona agresiones y enfrentamientos en el casco antiguo de Iruña. Los ultras intentan asaltar la sede de LKI y disparan a través de la puerta sin conseguir entrar. La policía completa la intervención deteniendo a todas las personas que se encontraban en el local. Como consecuencia de los enfrentamientos, un subteniente de la Guardia Civil es herido y una semana después moriría.


Tras la muerte del subteniente que iba de paisano en el mes de mayo, se produjeron detenciones que afectaban a miembros de las peñas de Iruña. El día 3 de julio, ocho personas se encerraron en el Ayuntamiento exigiendo la libertad de las personas detenidas por los mencionados acontecimientos. Comenzaron las fiestas de San Fermín, y el chupinazo se lanzó desde el primer piso de la Casa Consistorial, dado que el segundo, desde donde tradicionalmente se lanza, se encontraba ocupado por familiares y amigos de los detenidos. El día 7 de julio, tres peñas salieron al final de la corrida de toros, con sus pancartas plegadas y entonando el Eusko Gudariak. Así se llegó al fatídico 8 de julio.